Rafael Cadenas, poeta Barquisimetano.

El 21 de marzo se celebra el Día Mundial de la Poesía, ocasión propicia para dar a conocer a uno de los poetas Barquisimetanos más influyentes de la literatura contemporánea: Rafael Cadenas.
Cadenas nace un día de abril de 1930 en Barquisimeto, ciudad antiguamente llamada Nueva Segovia. Cerca de ella terminan o comienzan Los Andes, según se mire. Sus libros de poesía –Una isla, Los cuadernos del destierro, Falsas maniobras, Memorial,Intemperie, Gestiones y Amante-, así como los de prosa –Realidad y Literatura, En torno al lenguaje, Anotaciones, Dichos, Apuntes sobre San Juan de la Cruz- están recogidos en Obra entera, publicación del Fondo de Cultura Económica (México) y luego en la Editorial Pre-textos (España). Algunos años antes, Visor (España) le había publicado una antología. Hay traducciones de sus poemas en francés, italiano e inglés y, gracias a invitaciones, ha hecho lecturas en Estados Unidos, España, Portugal, Italia, Francia, Inglaterra, Austria, Alemania, México, Santo Domingo, Costa Rica, Colombia y Argentina. Reunió las traducciones hechas por él en El taller de al lado (bid&co, Caracas). Es profesor jubilado de la Escuela de Letras de la Universidad Central de Venezuela, donde dio clases principalmente de poesía española y norteamericana.
Ha recibido el Premio Nacional de Ensayo (1984), el Premio Nacional de Literatura (1985), el Premio San Juan de la Cruz y el Premio Internacional de Poesía J. A. Pérez Bonalde (1992), así como una beca de la Fundación Guggenheim (1986). Recientemente le fue otorgado en México el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances, antes llamado Juan Rulfo.
En poesía y en su vida le importa la veracidad. Significa correspondencia de las palabras con lo que se siente, y eso requiere vigilancia. Eso está expresado en su poema “Ars poética”, de su libro Memorial (1977). Le asombra el misterio inexpugnable de la realidad. Tiene mucho interés en la filosofía, en el estudio de la psique y, durante muchos años, en concepciones como el Zen, el taoísmo, el hinduismo y algunos místicos occidentales. En política, le preocupan los nacionalismos, las dictaduras de cualquier signo y las ideologías; en fin, está en contra de la destructividad humana, detrás de la cual están las desmesuras del ego. Aunque se sobrentienda con lo dicho anteriormente, defiende la democracia, la pluralidad y la convivencia, factores civilizatorios imprescindibles.
«EL POETA MODERNO habla desde la inseguridad.
No tiene más asidero que la vida. Seguramente una voz queda le dice en los adentros: la época de las causas terminó. Ya no puedes aferrarte a religiones, ideologías, movimientos, ni siquiera literarios. Se acabaron las banderas. Pero este desengaño lo libera para luchar en otra clave por lo que religiones, ideologías, movimientos dicen defender: lo religioso, lo humano, lo valedero.
Esa voz, que parece la del nihilismo, podría ser más bien la voz de la vida que desea recuperarnos.»
LOS POETAS no convencen.
Tampoco vencen.
Su papel es otro, ajeno al poder: ser contraste
Rafael Cadenas.
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Como un personaje de Sofia Coppola. Publicista. RR.PP. Docente universitario. Editora de @Barquisimeto.com Directora de @Barquisimovil y @SocialTrendingV Email de contacto: belkis@barquisimeto.com Twitter: @belkisaraque Web: www.belkisaraque.com